Los adjetivos son una parte esencial del lenguaje inglés. Nos ayudan a describir, identificar y cuantificar los sustantivos, aportando detalles y precisión a nuestra comunicación. En este blog te explico los diferentes tipos de adjetivos en inglés, cómo usarlos correctamente, y algunas reglas importantes a tener en cuenta.
En inglés y en todos los idiomas, un adjetivo es una palabra que describe o modifica a un sustantivo o pronombre. Los adjetivos pueden proporcionar información sobre el tamaño, forma, edad, color, origen, material, propósito y más. Por ejemplo:
Tamaño: big (grande), small (pequeño)
Forma: round (redondo), square (cuadrado)
Edad: old (viejo), young (joven)
Color: red (rojo), blue (azul)
Origen: American (estadounidense), Chinese (chino)
Material: wooden (de madera), plastic (de plástico)
Propósito: sleeping (para dormir), cooking (para cocinar)
Los adjetivos descriptivos son los más comunes y se utilizan para describir cualidades de un sustantivo. Ejemplos incluyen:
Estos adjetivos señalan o indican específicamente a qué sustantivo nos referimos. Los principales son: this (este), that (ese), these (estos), those (esos).
Indican pertenencia o posesión. Algunos ejemplos son: my (mi), your (tu), his (su), her (su), its (su), our (nuestro), their (su).
Indican cantidad. Ejemplos incluyen: some (algunos), many (muchos), few (pocos), several (varios).
Se utilizan en preguntas. Algunos ejemplos son: which (cuál), what (qué), whose (de quién).
Cuando se usan múltiples adjetivos para describir un sustantivo, generalmente siguen un orden específico en inglés: cantidad, opinión, tamaño, edad, forma, color, origen, material, propósito.
Los adjetivos pueden cambiar de forma para mostrar comparaciones. Los comparativos se usan para comparar dos cosas y los superlativos para comparar tres o más.
Para adjetivos largos (más de dos sílabas), se usan las palabras “more” y “most”.
En ocasiones, los adjetivos pueden funcionar como sustantivos, refiriéndose a un grupo de personas o cosas con la misma característica.
Evita usar dos comparativos o superlativos juntos.
Seguir el orden adecuado de los adjetivos es crucial para la claridad.
Algunos adjetivos son absolutos y no admiten grados de comparación, como “perfect” o “unique”.